-Francisco Conde pide al Gobierno de España que incremente las ayudas, lo que «atraería nuevas inversiones que evitarían la deslocalización y la pérdida de empleo».
-Eduardo Arasti lamenta que en la central de Aguayo, «mientras Europa ha cumplido su parte declarando el proyecto de interés comunitario, el Gobierno de España aún no ha proporcionado el marco retributivo necesario».
-Félix de las Cuevas afirma que el Gobierno de España “hace poco por la industria”.
El portavoz en materia de industria del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Francisco Conde, destacó hoy en Santander la urgente necesidad de que las industrias electrointensivas de Cantabria puedan competir en igualdad de condiciones con sus homólogas europeas.
En una rueda de prensa, tras la reunión mantenida con directivos de empresas electrointensivas de la región, comparecencia en la que estuvo acompañado por el diputado Félix de las Cuevas y el consejero de Industria, Eduardo Arasti, subrayó la importancia de incrementar las ayudas del Gobierno de Pedro Sánchez para atraer nuevas inversiones y evitar la deslocalización y la pérdida de empleo.
Conde se refirió a casos específicos, “empresas clave en la siderurgia y cogeneración” de la región y al respecto destacó que los altos costes energéticos en España, que son significativamente mayores que en Francia y Alemania, están perjudicando la competitividad de estas empresas. «El precio energético en España es tres veces más caro que en Francia y el doble que en Alemania», afirmó.
Tras hacer referencia a la falta de aplicación de las normativas permitidas por Europa, como la dedicación del 25% de los ingresos de CO2 para compensar los costes energéticos de estas empresas, Conde subrayó que, si se implementaran estas medidas, las empresas podrían competir en igualdad de condiciones y atraer nuevas inversiones, mitigando así la deslocalización de la producción industrial hacia otros países.
El portavoz también resaltó la situación crítica de las plantas de cogeneración, “muchas de las cuales están paralizadas debido a la falta de convocatorias de subastas necesarias para realizar inversiones en energías renovables como biomasa, biometano e hidrógeno” En este sentido, mencionó específicamente a Solvay como una de las empresas emblemáticas en este ámbito en Cantabria.
Asimismo, aludió al significativo peso del sector industrial en Cantabria, que representa el 20% de la economía regional, una cifra destacable a nivel nacional y elogió la «complicidad clara y un diagnóstico compartido» entre las empresas y el Gobierno regional para trabajar conjuntamente en mejorar la competitividad industrial.
Para concluir, Conde reiteró el compromiso del Partido Popular y del Gobierno de Cantabria para trabajar en conjunto con las empresas y asegurar la competitividad y el crecimiento del sector industrial en la región.
«Es fundamental atraer nuevas inversiones con certezas por parte del Gobierno y asegurar que nuestras empresas compitan en igualdad de condiciones con sus principales competidores en Europa», concluyó Conde.
EUROPA HA CUMPLIDO CON AGUAYO EL GOBIERNO DE ESPAÑA NO
En su intervención ante los medios, el consejero de Industria del Gobierno de Cantabria, Eduardo Arasti, aprovechó para referirse a la central hidroeléctrica reversible de Aguayo, destacando la “gran importancia” del proyecto de ampliación.
Sin embargo, señaló que para que la empresa Repsol pueda acometerla es necesario que se cumplan una serie de condiciones. En primer lugar, la extensión de la concesión para la explotación de la central debe ser de 50 años más, hasta 2080, solicitud que ya ha sido presentada a la Confederación Hidrográfica del Cantábrico.
Además, se requieren mecanismos urgentes que remuneren la flexibilidad y la seguridad del suministro al sistema eléctrico, es decir, un marco de ayudas que el Gobierno de España prometió y que es vital para garantizar la viabilidad económica del proyecto.
El consejero enfatizó que mientras Europa ha cumplido su parte declarando el proyecto de interés comunitario, el Gobierno de España aún no ha proporcionado el marco retributivo necesario, lo que está demorando la inversión y la creación de empleo en Cantabria.
“La visita de Francisco Conde, portavoz de Industria en el Congreso, es crucial para que el Grupo Popular pueda contar con toda la información necesaria y presionar para que este importante proyecto se convierta en realidad cuanto antes”, subrayó el consejero.
Según reiteró, la ejecución de este proyecto supondría la mayor inversión privada en la historia de Cantabria, con una cifra que supera los 800 millones de euros. Además, la construcción generaría un revulsivo económico extraordinario, con picos de empleo de hasta mil personas durante las obras.
La ampliación convertirá a Aguayo en la segunda central de bombeo más grande de España, con una potencia total de 1.360 megavatios. “Este proyecto no solo es esencial para Cantabria, sino que también tiene un valor estratégico para la gestión adecuada del sistema eléctrico y la integración de energías renovables en el país”, argumentó Arasti.
Para concluir dijo que Aguayo representa una infraestructura “crucial” también para los objetivos de descarbonización de Europa. “La pronta acción del Gobierno de España en la implementación del marco retributivo es esencial para que este proyecto estratégico avance y contribuya al desarrollo económico y energético sostenible”.
EL GOBIERNO DE PEDRO SÁNCHEZ HACE POCO POR LA INDUSTRIA
Por su parte, Félix de las Cuevas, en referencia a la reunión con directivos de las industrias electrointensivas y caloríficas de la región, expresó su descontento con el Gobierno de España, al que acusó de hacer poco por el sector industrial, especialmente por la industria electointensiva «crucial para la cornisa cantábrica y para Cantabria».
De las Cuevas destacó que la desventaja competitiva de estas industrias frente a sus homólogas europeas es «alarmante» y según añadió «esta situación se ve exacerbada por la falta de sensibilidad del Gobierno y su enfoque recaudatorio».