“Aspiramos a gobernar en solitario, igual que en Cantabria. El modelo es no gobernar con Vox, no estamos con los extremos”, defiende el candidato popular al Congreso el próximo 23J.
El candidato del PP cántabro tiene una amplia trayectoria tanto dentro del partido, en donde ingresó en 1986, como en la empresa privada, en donde ha sido consejero de Caja Cantabria pero sobre todo directivo en multinacionales como Saint-Gobain, de la que ha sido representante institucional. De puertas adentro del PP, fue su gerente durante algo más de seis años, entre 1995 y 2001.
Absolutamente ninguno. La Gerencia es un tema muy administrativo, del control del día a día de la actividad, del personal de la sede. Yo he estado de gerente seis años y medio, como he estado trabajando en una multinacional en Madrid como Saint-Gobain durante 12 años.
A diferencia de otros en la política que no tienen trayectoria laboral, usted sí la tiene. ¿Cómo decidió dar el salto a la política?
A mí la política siempre me gustó. Me afilié al Partido Popular en 1986, que entonces era Alianza Popular y tenía la sede en la calle Hernán Cortés de Santander. A partir de ahí, seguí estudiando e iba colaborando con el partido. En 2001 decidí dejar la Gerencia del partido y me fui al mundo de la empresa. En 2019, María José Sáenz de Buruaga [actual presidenta del PP y del Gobierno de Cantabria] me dio la posibilidad de formar parte de las listas nacionales. Es cierto que di ese salto y he sido tres años y medio senador. A partir de ahora, es verdad que estoy dispuesto a seguir en política. Estoy a disposición del partido. Y estar en política requiere dos cosas: lealtad y generosidad, siempre.
Usted es de los candidatos a estas elecciones que tiene segura la plaza en Cortes, dados los antecedentes… ¿Va a vivir en Madrid o en Cantabria?
Voy a vivir en Cantabria. Yo voy a Madrid lo estrictamente necesario, porque yo he vuelto a Santander para quedarme aquí.
La última legislatura en el Congreso tuvo Cantabria como representante al regionalista José María Mazón (PRC), que en esta ocasión no concurrirá a las elecciones del 23J. Su trabajo como diputado ¿será también reivindicativo o se debe a las líneas generales que marque el PP?
Si como todo parece, [Alberto Núñez] Feijóo va a ser el presidente a principios de septiembre, la situación será ideal para Cantabria, en Santander con Buruaga y en Madrid con Feijóo. Tenemos 365 medidas en el programa electoral que todas son beneficiosas para Cantabria. Creo que Buruaga será una presidenta reivindicativa, así se lo ha dicho a Feijóo, y este la atenderá porque conoce muy, muy bien los problemas de la Cornisa Cantábrica y Cantabria.
Destáqueme una de las medidas que afecte a Cantabria.
Hay un tema que está haciendo mucho daño al sector primario, que es la salida del lobo del LESPRE [catalogación como especie no cinegética]. Es cuestión de voluntad. El PP es quien tiene esa voluntad y el PSOE no quiere sacarlo.
La nueva normativa aplicada al lobo se basa en una directiva europea. ¿Es posible tumbarla?
Es una directiva europea y es una orden ministerial. Primero hay que tener voluntad política y luego Europa se está pensando mucho que efectivamente el lobo está haciendo mucho daño en la Cornisa Cantábrica. El otro día estuve en Cabezón de la Sal y a no más de kilómetro y medio del núcleo estuvimos en una finca en la que habían ‘caído’ 62 ovejas. En Cantabria se estima que ahora hay 36-38 manadas de lobos, cuando lo que debería ser sostenible es que no hubiera más de seis o siete manadas. Claro que queremos la conservación del lobo, pero desde luego controlado y volver a la situación de 2021 en que se controlaba. No queremos que el lobo haga daño a nuestros ganaderos.
Habla como si el principal problema del sector primario fuera el lobo. ¿No hay otros problemas?
Por supuesto que sí, pero la ganadería extensiva en Cantabria está en riesgo [por el lobo] y luego está el problema de la despoblación.
¿Cómo propone atajarlo?
Primero, dando servicios en los pueblos. Atraer a la gente que invierta con incentivos fiscales. Hay que sacar adelante medidas sencillas como la implantación del 5G, buenas comunicaciones y servicios. Todos los españoles tenemos que ser iguales en servicios.
¿Usted sueña estos días con los 70.000 votantes del PRC?
[Ríe] El domingo, día 23, las urnas están vacías y nosotros vamos a buscar el mayor número de votos posible. ¿Dónde está ese nicho de votos? Evidentemente, consideramos que la gente que votó al PP en las últimas elecciones volverá a hacerlo. Por supuesto que estamos por el voto socialista de quienes no son ‘sanchistas’. Recuerdo que hay ministros socialistas de [José Luis Rodríguez] Zapater que ya piden el voto para Feijóo y que dicen que Sánchez es el peor presidente socialista de la historia. Y además de ese voto moderado, por supuesto queremos que la gente del PRC que no quiera que las decisiones de Madrid las tome Sánchez con los independentistas y Bildu, voten un gobierno de centro-derecha. Nosotros vamos a por el voto general porque donde esté un gobierno sin ataduras, sin extremos, esa es la opción. El voto a Feijóo va más allá del Partido Popular y por supuesto que queremos el voto regionalista. Somos profundamente autonomistas, creemos en el Estatuto, hemos sido impulsores de la autonomía.
En un reciente mitin de Feijóo en Santander reclamó para sí el ‘Voto a España’. ¿Es que los demás partidos no son españoles?
Nadie duda de que el próximo presidente será Feijóo. Todos sabemos con quién ha gobernado Sánchez y con quién está dispuesto a gobernar, con un conglomerado de 17 partidos que es Sumar, quiere volver a gobernar con el apoyo de ERC y con el voto decisivo de Bildu. Y nosotros decimos que hay otra manera de gobernar, más centrada, sin división de bloques.
El Partido Popular en el pasado estuvo hablando con el nacionalismo vasco y catalán y ha negociado con ETA, sin olvidar ahora mismo que Bildu es un partido legal que está en las instituciones democráticas. ¿No cree que esa polarización es negativa para la sociedad española?
A diez metros de aquí [Hotel Santemar, en Santander], ETA nos puso una bomba. De eso nadie ha pedido disculpas, nadie se ha arrepentido. Hay temas con los que es mejor no jugar. Bildu es un partido que no ha condenado la violencia terrorista de ETA y hay un Partido Socialista que se ha apoyado en ese grupo para aprobar la Ley de Vivienda. No todo vale en política.
Feijóo también dice que han sido superadas las ideologías. ¿Es que todo da igual?
Todo el mundo tiene una ideología, es verdad, pero hemos tenido cuatro años en que Sánchez ha enfrentado a los españoles y ahí se ha sentido cómodo y nosotros no. Nosotros queremos resolver los problemas de los españoles. No me puedo imaginar lo que sería aquí un gobierno del PP y en Madrid una amalgama de partidos apoyando a Sánchez. Sería un auténtico desastre para Cantabria. ¿En cuanto a las ideologías? Nosotros pedimos el voto de la gente.
No me puedo imaginar lo que sería aquí un gobierno del PP y en Madrid una amalgama de partidos apoyando a Sánchez
¿Cómo se define ideológicamente?
Yo soy una persona centrada y me siento comodísimo en el Partido Popular. Creo en la solidaridad, creo en los derechos sociales, hay que ayudar a la gente más necesitada. Por supuesto eso es el PP. Cuando el gobierno ha sido del PP, ha mejorado la vida de los españoles.
¿Cree en lo público?
Creo en lo público, en la sanidad y educación públicas y en los derechos sociales. Eso hay que potenciarlo y a partir de ahí no se tocan. Yo he ido a un instituto y una universidad públicas y claro que defiendo lo público.
¿Cómo se potencia lo público recortando impuestos?
Lo que hay que hacer es gestionar mejor los recursos. Lo que hay que hacer es gastar con conocimiento. ¿Por qué este gobierno tiene que tener 22 ministerios? ¿Por qué lo que era una Subdirección General de Consumo es ahora un Ministerio? Lo que hay que hacer es gastar mejor y crecer más para que haya más actividad económica y más recaudación.
¿Eso no es un mito?
No, no, no. Es una realidad. Este gobierno, en 2022, ha tenido una recaudación extra de 36.000 millones de euros entre IRPF e IVA. Al subir los precios, la recaudación ha subido. Ahora estamos hablando pero cuando terminemos la entrevista España deberá nueve millones más de euros. Nos endeudamos 200 millones más al día. Llegará un momento en que no pueda ser. ¿Qué hacer? Más crecimiento, más y mejor empleo y, por supuesto, gestionar mejor lo público.
¿Le gustaría ver en Cantabria una sanidad como la de Madrid? ¿Sería este un ejemplo a importar?
He vivido 20 años en Madrid. Madrid es ejemplo de la buena gestión de lo público. Por supuesto que sí. He visto la transformación de Madrid. He visto cómo, cuando gobernaba Esperanza Aguirre, se construyeron diez hospitales públicos, cómo se transformó la M-30 con [Alberto Ruiz] Gallardón, yo he visto cómo los colegios bilingües empezaron en Madrid. Es un mito lo de la sanidad de Madrid. Claro que me gusta. Yo he estado en su sanidad pública y funciona perfectamente. La gente que vive en Madrid está encantada.
No todos los territorios son Madrid…
Usted me pregunta por Madrid y yo le contestó con Madrid, que es un territorio de libertad.
¿En sus cuentas les sale el cuarto diputado?
¡No tenemos cuentas! El Partido Popular en Cantabria no tiene una encuesta propia, pero me gusta estar en la calle y estoy contento de que la calle esté por el cambio del Partido Popular.
¿Cómo puede interpretar la gente del PP haber pasado por una campaña dura contra lo que calificaron como el ‘revillismo’ y luego se pacte con él la investidura?
Le niego la mayor. No ha habido ningún pacto. En todas partes que recorrió Buruaga en campaña siempre dijo que gobernaría en solitario si le daban los números. Solo hay miembros del PP en el Gobierno regional. El Grupo Parlamentario tendrá que negociar presupuesto a presupuesto.
¿Qué le pareció el gesto de Revilla de abstenerse?
Me parece que fue correcto que, ante un buen resultado del Partido Popular, se abstuviera. Eso es positivo y hay que reconocérselo a Revilla y al Grupo Regionalista.
El Partido Popular está formando gobiernos con Vox, como en el caso de Extremadura, la Comunidad Valenciana o previamente en Castilla y León. ¿Cómo encajaría usted un gobierno de coalición en Cantabria o en Madrid?
Los electores tienen que hablar el día 23 y a partir de ahí se verá, pero el presidente Feijóo, a lo que aspira, al igual que en Cantabria, es a que haya un gobierno con una base social tan amplia que le dé un resultado como para gobernar en solitario. El modelo es no gobernar con Vox. En el debate le pidió a Sánchez que si ganaba le dejara gobernar y si ganaba el PSOE igual, pero no estamos con los extremos.
El PP defiende ahora que gobierne la lista más votada, pero hay comunidades en donde está gobernando sin ser la lista más votada con acuerdos con Vox. ¿Una cosa es predicar y otra dar trigo?
Yo creo que los pactos hay que firmarlos antes de ir a las elecciones. Una vez que transcurren, el PSOE no quiere ese pacto. Con los pactos hemos sido muy generosos, dando la Alcaldía de Vitoria y Barcelona y haciendo posible que Bildu no gobierne. Nuestro modelo no es gobernar con Vox. Vamos a tener el mayor respaldo posible el día 23 y a partir de ahí veremos cómo gobernar. Pero el objetivo no es gobernar con Vox. Aquí Vox, en Cantabria, ha votado con la izquierda para que el PP no esté en el gobierno.
¿El PP no votó en contra en una investidura y hubo que repetir elecciones?
Este gobierno socialcomunista ha trabajado para lo que Sánchez quería, que es gobernar con los independentistas. En el año 2019 había dos partidos, PSOE y Ciudadanos, que tenían 186 diputados. No hacía falta repetir elecciones. Pasó todo el verano diciendo que con Podemos jamás pactaría. Luego tiene el gobierno que eligió. En 48 horas vio el acuerdo con Podemos.
Es usted coordinador en Industria del PP en Cantabria. ¿Cómo resolvería el nudo gordiano de la industria en Cantabria?
Conozco bien a las electrointensivas. Aquí el problema de Cantabria y España es que paga el doble por la energía eléctrica que en otros países. El estatuto electrointensivo de España se quedó corto y no ha resuelto el problema. Tenemos que hacer lo que hace Europa: los derechos de emisión que paga la industria devolvérselos al 100%.
¿Es partidario de la energía nuclear?
Soy muy pragmático. España sucumbió en los 80 al ‘no nucleares’. Pero en Francia tienen 80 reactores y produce el 70% de la energía de fuente nuclear. Yo estoy a favor de las renovables y tenemos que hacer una transición ecológica a todo. Tenemos que darle una vuelta a todo, también a la nuclear. Europa la ha declarado energía verde. Tenemos que hacer un mix energético con un precio competitivo, igual que en Francia.
¿Y qué solución ofrecen a las infraestructuras de Cantabria?
Una obra fundamental para Cantabria está fuera, es la autovía Aguilar-Burgos, que lleva 22 años esperando. Cada vez que está el PSOE en el gobierno la paraliza. El ministro Íñigo de la Serna [también exalcalde de Santander, PP] la dejó encarrilada con más de 400 millones y de nuevo estamos tramo a tramo. Los mejores trenes que había aquí se los llevaron a Cataluña y con De la Serna hubo un programa que dejó encima de la mesa en 2018 otros 530 millones de euros para solucionar el problema de las Cercanías. ¿Qué hemos tenido a cambio? El ridículo nacional de unos trenes que no cabían por los túneles.