Solvay es una de las industrias fundamentales de Cantabria y lleva más de un siglo generando riqueza y bienestar en Torrelavega y su comarca. Ahora, en una importantísima transición energética, que requiere una fuerte inversión por su parte, no está recibiendo del Gobierno de España ni claridad normativa ni acceso a ayudas de descarbonización de su proceso productivo. Esa incertidumbre retrasa las inversiones y compromete la situación. Una vez más, la alianza PSOE-Podemos-IU que gobierna ahora España pone en peligro el futuro de las industrias cántabras, ante la pasividad de las autoridades autonómicas, locales y, en algunos casos, incluso los agentes sociales que se supone velan por los intereses de los trabajadores.
He presentado en el Senado una pregunta para forzar al Gobierno del PSOE-Podemos-IU a pronunciarse con claridad sobre Solvay. Ya se han lavado las manos insolidaria e irresponsablemente después de precipitar la muerte de Sniace, y no queremos que ocurra lo mismo con otras industrias de Cantabria.
Vamos a mantener una presión alta en el Senado en defensa de nuestra industria, sus puestos de trabajo y el sustento de miles de hogares de nuestra región cuyo bienestar y oportunidades dependen por completo de nuestro importante tejido industrial.